28 de diciembre de 2017

Fin de año si lo celebro.

Plenamente orgulloso he pasado estas Navidades: “Cus Cus” tunecino de comida y Ribera del Duero. En contra del gasto capitalista no he hecho regalos y la comida me la hicieron mis inmigrantes. Eso sí compré el pescado. Mis clases de árabe intensivas y mi buena literatura gratis pues es de biblioteca municipal (Club de lectura).
Hoy es 28 de diciembre. Y fin de año -que ya no es festividad capitalista católica- sí lo celebro en casa de mi hermano Suso con la familia O´Countryside -abogados vigueses-, con quienes compartí colegio mayor en Madrid.
Y claro en fín de año habrá que emborracharse.
¡Mi querido Baco no te defraudaré!.
Los Ok-Countryside son buena gente y nos lo pasaremos bien.

No como en mis años de juventud en Pontevedra: Absoluto desfase: Hachís: Mariguana. Algún trippi.

Pero bueno se ve que ya me he hecho mayor.

Y me sigue molestando que alguien me diga cuando me tengo que emborrachar, aunque sea el calendario. Yo prefiero celebrar algún día aleatoriamente,


Pero bueno dejaré dormir a mi filósofo radical y poeta y me limitaré a colocarme de alcohol del caro. Y a fumarme algún puro.
                           Kiko Cabanillas.

25 de diciembre de 2017

Navidades sin resaca.

 Pollo al cuscús tunecino, vino tinto Ribera del Duero, y JB. (Una copa de cada -bueno vino tres-).
En consecuencia no tengo resaca por primer año, de los últimos cuarenta.
Tayyeb, mi profesor de árabe me trajo una bellísima compatriota tunecina a casa, que me cocinó un “Cus Cus” tunecino.

Así pues celebré la Noche Buena sólo.

Lo que si eché de menos fue un porro bien cargado. Que además no deja resaca.

Y hoy “Navidad, dulce Navidad” comeré pasta a la tunecina, que ya tengo preparada en la nevera.
Caerá sin lugar a dudas otro JB.
Si bien voy a llamar a Tayyeb, quien es muy posible que quiera dar clase hoy. Lo dejaré para mañana.

Os recuerdo: Cogí a Tayyeb por no poder seguir el ritmo de la Escuela de Idiomas. Y al cabo de unos meses he dejado la escuela y me he quedado con Tayyeb.
Tayyeb es hoy mi “Aji tunecino” (hermano tunecino).
Y tengo convencido a mi hermano Javier para que vayamos al citado país árabe la próxima Semana Santa, con Tayyeb de guía turístico

A cambio de le pagaremos el billete de avión.

Pues sí: Éste año: Recién divorciado: Por fin pude celebrar las fiestas católicas capitalistas como me dio la gana. Es más no las celebré.
Pues estoy con todos aquellos que no pueden celebrarlas: Pobres, putas y colgaos, poetas y trastornaos.

Y para rizar el rizo tanto ayer -Noche buena- como hoy -Navidad- no me voy a gastar un sólo euro.
Tengo el congelador lleno y ocho libros de la Biblioteca Municipal. Y alcohol.


En Fin de Año, que ya es otro cantar, sí celebraré la fiesta: Voy a casa de mi amigo-hermano Javier. Y allí con los hermanos O Campo. Abogados vigueses: Buena Gente, sobre todo.
                                    Kiko Cabanillas.

22 de diciembre de 2017

El mundo de la “Harisa”: Picante tunecino.

Hoy tuve el inmenso honor de recibir en casa a tres tunecinos: Tayyeb -mi profe de árabe- , Selma -cocinera, y Bahiy -hijo de ella. Mustafá -el marido de Selma- fué a buscar entradas para el partido del Depor-Celta, y por eso no pudo venir.
El plato estrella fué un cuscus con lubina.
Y todo condimentado con Tabel, Harisa y Salsa de Tomate preparada. Ajo y Laurel.

Un día un entendido en gastronomía me dijo: Ni con todo el dinero del mundo encontrarías un restaurante que te preparase esos platos. Recordemos la “Cachupa cavoverdiana” que me hizo George o la tortilla siria de Ahmed.

Bahiy es un chaval fantástico que habla inglés, francés, árabe y español y tiene nueve años.

Respecto a Tayyeb: Tan encantador como siempre.
Y con plena seguridad puedo decir ya que tengo un buen amigo tunecino.
Además seguramente en semana santa mi hermano Javier y yo vayamos a Túnez con Tayyeb de guía turístico. A cambio de sus servicios le pagaremos el avión.

Al acabar la comida fuimos al Carrefour a comprar turrón y Bahiy fué al cine.

Finalmente, volvió Tayyeb trayéndome dátiles.
                                              Kiko Cabanillas.



-Ahmad y Tayyeb: Cristmas. Desembarco compostelano

Mi amigo y alumno de español Ahmad -sirio- acaba de regresar de Santiago, de trabajar en las casas de turismo rural de mi hermano Suso.
Sólo se quejó del frío y de la ausencia de Leti.
Mi también amigo Suso quedó muy contento con su trabajo. Y si duda le llamará más.

Por otro lado tenemos al tunezino  Tayyeb, quien me da clases de árabe. Y hoy viene con un amigo, quien, mientras damos clase, nos va a preparar un “Cuscus con Lubina”.

Le he propuesto a Tayyeb viajar a su país pagándole el billete a cambio de que nos haga de guía a mi hermano Suso y a mi. Y aceptó encantado.

Me ha sugerido incluso acompañarle a un viaje a Túnez de tres meses.

Todo puede ser.
Entre tanto estoy ya preparando mi desembarco en la compostelana casa de turismo rural de Suso, donde voy a organizar un taller literario y pretendo dar clases de alfabetización a los paisanos de O Pino.

Y en enero previsiblemente Juan Mariñas -mi editor- me publica el libro “Raptos místicos”.

Me va a costar muchísimo dejar A Coruña. Pero en un principio trataré de compatibilizarlo todo.
Los fines de semana los dejaré para escribir.


Kiko: Inmigración, Literatura y Enseñanza.

                                Kiko Cabanillas.

20 de diciembre de 2017

-Mis Navidades-

Fiesta católica capitalista renuncio a tí.
He calculado que me gastaría unos 300 euros en regalos y comida.
Cantidad que transferí ayer a la ONG Ecos do Sur.

Me disculpé con mi padre, quien entendió perfectamente mis explicaciones.
Y con mi hija.

Aprovecho la ocasión: Me acabo de divorciar: No tengo compromisos con mi familia más próxima..

Ya me ha dicho Patxi en que van a emplear mis 300 euros: Comprarán una cafetera para poder ofrecerles un café a los inmigrantes que acudan a la sede en A Coruña.

El año pasado, el dia de Navidad me encontré al negro George en un bar. Y le invité a un café y un pincho de tortilla. Lo comió ansioso de pura hambre. Le caía la tortilla de la boca a la mesa.

Pues estas fechas serán para mi las de máxima austeridad.
Y quizás deberían ser así para todos.
Es que acaso no se os rompe el alma cuando salís de una tienda cargados de regalos y veis a un sintecho pidiendo a la puerta vestido de Papá Noel y cantando -con un quejio lleno de dolor-: Feliz Navidad.

Ahora toca ser feliz. Lo dice el Corte Inglés.
Y tu con tu cara de cebollino eres feliz por cojones.
Te olvidas de todos tus problemas por unos días.

Echas mano de los antiácidos

E ignoras al mendigo.

Pues no caballeros. Hay otra forma de ser feliz. Fuera de fechas programadas. Todos los días. Ama al prójimo cojones. Que es como tu sólo pero con peor suerte.

¡Navidad, Navidad, puta Navidad!.

                                                    Kiko Cabanillas.

8 de diciembre de 2017

Próximo destino Túnez.

Mi profe de árabe se llama Tayyib. Y el otro día me propuso viajar con él a Túnez.
Inmediatamente comenzaron mis neuronas a trabajar.
La minusvalía no sería problema, pues ya he viajado después del accidente: Nueva York, México...
Me dijo mi profe que podríamos llevar a Julia -mi hija-, a lo que yo le contesté que sería maravilloso.
Inmediatamente vino a mi mente la idea de proponerle a mi hermano Javier que se viniera con mi sobrina Paula. A lo que él me anunció: "No te digo que no. ¿Cuando sería?". "La próxima Semana Santa", le dije.
Tayyib me dijo que me enseñaría desde las zonas más pobres a las más ricas. Para tener una visión global del país.
Yo además practicaría mi árabe, que ya va viento en popa: Escuela Oficial de Idiomas y clase a domicilio con Tayyeb.
Me comentó mi profe que era sorprendente el buen acento árabe que tengo...
Y es que en otra vida yo nací en Túnez y regentaba una tienda de alfombras con mi primo Enrique, con quien vendía hachís a los extranjeros para cuadrar mis mensualidades.
Tengo especial interés en ir con mi hija Julia a un país en desarrollo.
Yo Túnez ya lo conozco, pero fue en un viaje turístico con mi mujer, aséptico y de pulserita. Plastificado.

Ahora iría con un local, con mi hija. Y con mi hermano y mi sobrina.

Kiko Cabanillas.

5 de diciembre de 2017

Lombarda con piñones y soledad.

Ahora que me he divorciado por fin podré hacer mi sueño navideño: No celebrar la Navidad.
Orgásmica fiesta capitalista católica.
Soy comunista aunque no se lleve.
Y soy ateo “Cajondios”.
Por tanto no tengo nada que celebrar.
No haré regalos ni quiero que me los hagan.

El día de Navidad saldré a la calle a repartir limosnas.
Si bien es posible que me limite a dar un donativo a la ONG Ecos do Sur, el equivalente a lo que me gastaría en regalos a la familia.

Esta iniciativa no es perfecta pues como venden turrón en el Carrefour desde hace ya una semana obviamente han conquistado mi alma y siempre hay un par de tabletas en la nevera.

He difundido mi iniciativa por was y ya he recibido varias felicitacionnes..

Mi hermano Javier me decía “A mi me pasa lo mismo”.
Y yo le contesté: “Pues únete a la empresa “Cajondios””. Añadía “Ana y yo lo vemos a celebrar con un pollito y sólos. Vente”. A lo que yo le contestaba “Gracias. Pero prefiero estar sólo”.

Lo que más me cuesta es lo del buen comer. Pero trasladaré la fiesta gastronómica a cualquier otra fecha”.

¡¡¡¡¡¡NO NOS MIRES ÚNETE!!!!!


Kiko Cabanillas.